Los bebés son personitas que dependen totalmente de nosotros y que constantemente se están adaptando a los cambios y las nuevas rutinas, esto es beneficioso para los padres porque le podemos habituar a que duerman de noche, así que olvídate de las ojeras y de las malas noches, porque sí es posible que tu bebé duerma más de noche que de día, pero requerirá paciencia y buen humor.
Los bebés recién nacidos tienen una característica que es, que no duermen toda la noche, la mayoría de bebés tiene el sueño invertido, es decir, duermen más de día que de noche, lo cual es tedioso para los padres y muy cansado.
Si bien es cierto que no hay que forzar al recién nacido a dormir cuando uno quiere o a la hora establecida por los adultos, ya que ellos irán adaptándose conforme pasen los meses, sin embargo, lo que sí podemos hacer es crear rutinas e ir incentivando y acompañándolo en este proceso, para que se adapte a dormir de noche y estar despierto de día.
Seguro haz escuchado muchos mitos o opiniones respecto a las soluciones para que tu bebé duerma de noche, pero no debemos hacer caso a cada comentario de las personas, ya que cada bebé es distinto y único, tiene su propio ritmo, sus propios gustos y solo tú como mamá o papá podrás ir creando una rutina que se adapte a tu estilo de vida.
No es posible hacer dormir a un bebé igual que un adulto, es decir; 8 o más horas seguidas y todavía de noche, los bebés se levantarán a amamantar, a que lo pasees y les cambies el pañal.
Por ello, en este artículo de PRIMER BEBÉ te diremos cómo hacer para que tu bebé duerma más de noche que de día y conforme crezca pueda dormir toda la noche de corrido.
Los 4 mejores consejos para que el bebé duerma de noche
Como ya hemos dicho, los bebés están adaptándose constantemente, ellos son como esponjitas que absorben todo y sus primeros aprendizajes y hábitos vienen desde casa, así que, para que recién nacido duerma toda la noche.
No existe una fórmula mágica, pero sí 4 buenos consejos que le ayudarán a crear el hábito de dormir por las noches y te servirán a ti para descansar bien y rendir al 100% en tu día a día como madre y mujer.
#1. Cuida el ambiente
El bebé solo dormirá rápidamente si el ambiente es adecuado para él, ellos desde los primeros días de vida conocen su hogar, por la forma del techo, el olor, las voces, los sonidos, etc. y aprenden a reconocer que ese es el lugar donde deben dormir. Por esta razón cuando vamos de visita a otras casas cuesta más tiempo hacer que el recién nacido concilie el sueño. La recamara donde duerma el bebé debe tener las siguientes características.
- La recámara debe estar adaptada para él, sin importar si sea grande, muy amplia o pequeña, pintala de un color suave, que le permita conciliar el sueño. Los colores más usados son: Si la bebé es mujer, rosa suave, si el bebé es varón, celeste suave o también puedes optar por colores neutros como el blanco o beige, esto debe ser a tu elección.
- La habitación debe estar siempre limpia y con un olor suave, evita limpiarlo con aromatizantes fuertes o químicos de olor intenso, porque podría incomodar al recién nacido y evitar que duerma rápidamente.
- El ambiente donde duerme el bebé debe tener la temperatura adecuada, es decir entre 22 y 24°, de ser posible comprar calefacción para los días fríos.
- Evite colocar demasiados peluches, juguetes y sonajas en la habitación, que puedan captar la atención del recién nacido y distraerlo mientras intenta dormir. Asimismo no coloques juguetes en la cama donde dormirá el bebé.
- Evita las luces de colores, de preferencia pon un foco blanco y coloca alrededor del foco una tela para que la luz sea tenue y no le de directo en la vista.
- Pon en la habitación una radio o un parlante donde le puedas reproducir música relajante o de cuna a un volumen bajo para que el bebé duerma rápidamente. Si no deseas hacer esto, puedes tú mismo cantarle al bebé, lo cual será muy agradable para él, ya que a ellos les gusta escuchar la voz de sus padres porque los hace sentir seguros.
#2. Ten una buena actitud
- Debes estar atenta a las señales que te de tu bebé cuando esté cansado y con sueño, estas son: Aburrimiento, ojos rojos o llorosos, sobarse constantemente los ojos, entre otros signos, mientras más tiempo estés con tu bebé y lo observes, irás conociendo mejor.
- Ten paciencia, no puedes pedir que tu bebé duerma toda la noche de corrido y no haga sus siestas ni duerma de día, por el contrario, debes permitirle realizar siestas de día e ir habituandolo a dormir de noche de corrido en un horario sensato.
- Si tu bebé despierta en la noche, evita prender la luz, ya que esto sólo terminará de levantarlo por completo, por el contrario, puedes ofrecerle pecho, cántale una canción, pasealo o hazle el sonido del mar (shhhh), este sonido los relaja mucho, ya que es similar al que oían cuando estaban en el vientre de la madre.
#3. Evita sobre-estimular a tu bebé
- Como padres nos encanta estar con el bebé, cargarlo, hacerlos jugar, etc. Todo esto está bien, pero debemos hacerlo con moderación para que el bebé pueda dormir de noche y no se sobresalte.
- No exageres en el movimiento del bebé cuando lo hagas dormir, no lo samaquees mucho ni te desesperes, porque esto en vez de ayudar, solo empeorará el panorama.
- Si mueves exageradamente al bebé solo conseguirás que te duelan los brazos, hombros, cuello, además te estresas y el bebé no conciliara el sueño, ya que el necesita serenidad para descansar. Así que ya lo sabes, evita cometer nuevamente este error de padres primerizos.
- No permitas que el recién nacido tenga contacto con la tv, celulares o tablets antes de dormir, ya que esto será perjudicial para él, de preferencia nada de pantallas hasta que crezca más. Y si tu estas mirando tv, coloca al bebé en una posición contraria, pero de preferencia nada de pantallas 1 hora antes de que el bebé duerma para que no esté sobreestimulado.
- Antes de acostar al bebé, fíjate que no tenga ninguna necesidad, es decir que su pañal esté seco, que su ropa esté seca y limpia, que haya tomado su leche, votado gases, etc. Asimismo, cuando el bebé despierte de noche, bríndale los cuidados necesarios lo más tranquilo posible, recuerda que si tú te estresas, el bebé también lo hará y si estás relajada, eso mismo le transmitirás al recién nacido.
#4. Crea rutinas
Los hábitos o las rutinas son muy importantes para que el bebé duerma toda la noche, estas deben ser repetidas todos los días pacientemente y al cabo de una semana aproximadamente, el bebé dormirá en las horas que hayas establecido.
Ten mucha perseverancia, ya que algunos bebés pueden tardar menos o más tiempo en acostumbrarse a las rutinas.
A continuación te detallamos una buena rutina para que tu recién nacido duerma toda la noche.
- Lo primero que debes hacer en el día es observar al bebé y no permitir que se duerma por aburrimiento, calor u otro síntoma que no sea sueño verdadero, evita sobreabrigar al bebé y por el contrario en el día tenlo con ropa ligera.
- Asimismo en el día abre las cortinas y mantén el ambiente iluminado, si vives sola o no hay ruido en la habitación, coloca música y habla con tu bebé para que él sepa que es de día y aprenda a distinguir el día de la noche.
- Permítele tomar siestas de día cuando te des cuenta que tiene sueño y adaptalo de a pocos a la rutina.
- Bañaló 1 hora antes del tiempo que hayas establecido para que el bebé se duerma. Algunas personas siguen creyendo que es malo bañar al bebé de noche, pero esto no es cierto, de hecho los pediatras recomiendan bañarlos a esta hora porque podrán dormir mejor, relajarse y ya no les dará aire.
- Después de su baño, colócale un pijama calentito para dormir, ten en cuenta que la ropa para dormir debe ser más caliente que la del día, ya que si el bebé tiene frío no dormirá bien, asimismo debe ser ropa cómoda y de preferencia que sea de algodón.
- Seguidamente ponle una canción de dormir o tu misma cántale una canción de cuna mientras lo amamantas o le das su biberón con leche, asimismo ve meciéndolo muy despacio, si ya termino de amamantar y no se duerme, háblale, dile buenas noches, ráscale la cabecita y sigue paseando suavemente a tu bebé.
- Si el bebé no duerme, no te desesperes, no grites, no reniegues y siempre mantén la calma. Recuerda que el cerebro reacciona mediante estímulos, así que si fuerzas al bebé a que duerma, al siguiente día pondrá mucha más resistencia porque quedará grabada la escena desagradable.
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